Oración Funebre I

A Sofía
Señor, hoy vengo de rodillas a tu altar
Desecho, consternado, agotado
Mis manos temblorosas se entrelazan,
Aunque parece que se esconden,
Se abrazan como dos niños aterrorizados.
Mis ojos arden como paja seca,
Mis lágrimas ácidas han caído todas
Corroyéndome y corroyendo tu existencia,
Enturbiándome el alma.
Estoy ciego, mi lengua yace inerte detrás
De mis labios secos como piedra pómez.
Te busco en la oscuridad para suplicarte:
¿por qué?

0 comentarios:

  © Blogger template The Professional Template by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP